jueves, 28 de septiembre de 2017

Clase N° 15 /año 4 - martes 26 de septiembre 2017



Se entrega por primera vez

PREMIO ESTÍMULO
JOVEN POESÍA  
DE LA FAP:


los que nos estimularon a 
ver el otro lado de la lluvia


El Premio Estímulo que acaba de entregar por primera vez la Fundación Argentina para la Poesía fue un estímulo para todos nosotros, los poetas más grandes, los mayores de 40.

El verbo stimulare en latín significa aguijonear, pinchar, excitar. Creo que fueron ellos con sus lecturas los que nos estimularon a ver el otro lado de la lluvia. Nos mostraron frescura y fe en la renovación de las mismas palabras gastadas por nosotros. Nos contaron acerca de sus proyectos multimedia, videodanza y poesía, video y poesía y todo un universo propio, con sus sonrisas tímidas y su encanto nos hablaron de la flecha que significa el poder de la palabra poesía para transgredir y abrir otros caminos.

La torrencial lluvia de la pasada noche del martes 26 de septiembre en el tercer piso de la SADE en Buenos Aires fue eso, un sacudón aguijoneante, un pinchazo de felicidad poética que significó para nosotros el poder escucharlos.





Estuvieron en Abordajes poéticos

Natalia Litvinova
Alejandra Schnorr
Ariel Delgado
Max Trincado
Ivana Szac

Y leímos los poemas de María Evangelina Aguilera, que vive en Mar del Plata y no pudo viajar para este encuentro.

cada uno de ellos nos contó acerca de su experiencia poética, sus anhelos, su vínculo con la palabra, su alegría por haber participado de esta experiencia poética que fue el Premio Estímulo de la FAP.


Aquí el testimonio del audio de nuestro encuentro, en el que cada uno leyó sus poemas y la recepción por parte de los poetas que estábamos acompañándolos: los miembros del Consejo de Administración de la FAP, Lidia Vinciguerra, Norberto Barleand y Marilís Luna Dávila, la actriz e intérprete Marta Albanese, uno de los jurados del Premio Estímulo, Rubén Balseiro, Carina Paz y quien escribe esta crónica y condujo el encuentro, Sandra Pien, más los miembros de nuestro taller Abordajes poéticos



La Yapa

1- Este es el audiovisual de un poema Ivana Szac, titulado "La furia del mundo"



Parroquiales

Este martes 3 de octubre tendremos una noche de celebración de la poesía con mayúscula. Nos visitarán, leerán sus poemas y reportearemos a estos premiados: Carina Paz, Teresa Lippo (una tallerista nuestra que nos dio esta inmensa alegría), Liliana Corredera, Susana Cattaneo, Paola Ippolito e Inés Legarreta. 







¡Nos deseo una muy buena semana poética! 
Y para los talleristas que quieran, ¡suban sus poemas!! :)






domingo, 24 de septiembre de 2017

Clase N° 14 /año 4 - martes 12 de septiembre 2017

LUNFARDO/ 3: 
DANIEL GIRIBALDI 

“POETA DE ALTA ALCURNIA MILONGUERA”




Las portadas de Bien debute y a la gurda, 1985, y Sonetos mugres, 1982, ambos de Torres Agüero editor. En medio, un retrato de Daniel Giribaldi. 


Fue Poeta, con mayúscula. Fue Periodista, con mayúscula, sí. Daniel Giribaldi trabajó en Clarín, en Crónica (fue el creador de Croniquita, el suplemento infantil que tuvo por años ese diario), en (el viejo y original) Tiempo argentino, entre muchos otros.
Finísimo poeta, fue un gran sonetista, quevediano, traductor de Baudelaire, vallejiano (me moriré en París o en el carajo… dice).

En la Academia Porteña del Lunfardo ocupó desde 1982 el sillón de quien también había sido poeta y periodista, Francisco Bautista Rímoli bajo el apodo de Dante A. Linyera. “Poeta de alta alcurnia milonguera” lo llamaba Edmundo Rivero.

Daniel Giribaldi había nacido en Rosario el 30 de abril de 1930 y murió en Buenos Aires el 2 de noviembre de 1984. Y vivió en estado de poesía.
En realidad se llamaba Diógenes Jacinto, pero a él no le gustaba, así que se rebautizó Daniel. Cora Cané dijo de él que fue “el poeta, el amigo bohemio, bueno hasta la médula, alegre en su sonrisa y llena de melancolía su alma pura”, y Roberto Selles lo describió así: “Fue un metafísico que solía esconderse tras la aparente cachada lunfa”. 
De muchacho Giribaldi había sido mecánico en la vieja empresa rosarina de tranvías y luego pudo comenzar como periodista en el diario El Tribuno

Jorge Conti cuenta en Aguafuertes radiales que "una vez escandalizó a los académicos de la Facultad de Filosofía y Letras. Se hacía un seminario sobre poetas del Litoral, y además de buenos poetas y escritores había un montón de figurones, de esos que siempre están para nutrir sus currículums.
Harto de las discusiones de “monos sabios”, Giribaldi se levantó y les dijo: “yo vine porque el amigo Saer, acá presente, me dijo que acá íbamos a hablar de poesía en serio, así que me voy… ¡araca, bizantinos, que se viene la maroma!” Y se fue, dejando a un montón de figurones perplejos".
Trabajó también de redactor de manuales e incluso fue funcionario –con pistola al cinto del Servicio Penitenciario Nacional–. Su obra comenzó en 1958 con los relatos de Villa de Dios no se entrega. En 1959 siguieron los poemas de Agua reunida y la novela El desarme. Casi diez años más tarde publicó los versos lunfardos de Sonetos mugres y en 1974 7 milongas de un saque. Lo mejor de su obra rodó, sin embargo, en innumerables hojas sueltas que regalaba por doquier. 
La irrupción triunfal de Giribaldi en la poesía lunfardesca se produjo con los Sonetos mugres, que aparecieron avalados por quienes eran entonces presidente y secretario de la Academia Porteña del Lunfardo, José Barcia y José Gobello. 
Fundador de Poesía Abierta en 1982, un movimiento poético,  un ciclos de encuentros de poetas en donde los únicos excluidos eran los dictadores, porque -decía- jamás se encontrará alguno que sea poeta.

Fue uno de mis maestros de periodismo, y fue él quien me llevó allá por 1984/5 a aquellas reuniones de Poesía Abierta que realizábamos en el bar La poesía, a las recorridas para leer poesía en las cárceles, a publicar en Brújula, revista de poesía mural. 

Con el soneto titulado, precisamente, “El artesano”, de Bien debute y a la gurda comienza con un juego paródico en el que imita los versos iniciales de una famosa composición de Rubén Darío: «Yo soy aquel que ayer nomás decía/ el verso azul y la canción profana...». Giribaldi se sentía un modesto y feliz artesano de la palabra, y lo cuenta de esta manera:


El artesano

Yo soy aquel que ayer nomás batía

el verso mugre y la canción ranera.
El que casi amasija a una mechera
que el mate cebó con agua fría.

El que quilombizó la taquería
la vez que cayó en cana en la tercera,
cuando escribió en una pared fulera:
¡Quevedo volverá! La Poesía...

El trompa y el peonacho de la rima,
el que apiló palabras a destajo,
el que en la viola fue bordona y prima.

Y al fin de su jornada de trabajo
siente que el mundo se le viene encima
y canta un mundo que se viene abajo.




Este es otro maravilloso soneto lunfa:

El llamado

Hacía ganas de morir. Llovía.
No había dónde ir. Daba pavura
la noche afuera. Y en el alma oscura
la lluvia que caía y que caía.

Un fanfa batiría: “la hice mía”.
Pero no. Me mojé con tu ternura.
Cebaste mate. En la catrera dura
me ayudaste a llegar al otro día.

¿Hoy? Quizás el balurdo ya no funque.
Tal vez sus mates con tu yerba cebe
un dorima tarúpido y cualunque.

Pero hace ganas de morir y llueve
y quiero estar con vos. Mi telefunque
es tres siete, dos siete, siete nueve.



Parodió al gran César Vallejo, que decía en su bello poema

 Piedra negra sobre una piedra blanca

Me moriré en París con aguacero,
un día del cual tengo ya el recuerdo.
Me moriré en París -y no me corro-
tal vez un jueves, como es hoy, de otoño.

Jueves será, porque hoy, jueves, que proso
estos versos, los húmeros me he puesto
a la mala y, jamás como hoy, me he vuelto,
con todo mi camino, a verme solo.

César Vallejo ha muerto, le pegaban
todos sin que él les haga nada;
le daban duro con un palo y duro

también con una soga; son testigos
los días jueves y los huesos húmeros,
la soledad, la lluvia, los caminos...


Y nuestro querido Daniel Giribaldi lo dice así: 

El velorio

Me moriré en París, o en el carajo
un día jueves o, si no, un domingo,
en el bulín que está, si no le chingo,
cerca del Rin, el Paraná o el Tajo.

Espicharé a la gurda y no me rajo:
quizás tendré una cacharpaya en gringo
y allí el Jorge y el John, el Paul y el Ringo
tocarán... si andan flojos de trabajo.

Será un velorio piola, tendrá gancho...
Alguien dirá: “Fue un punto divertido”.
Alguien también me llorará a lo chancho.

Y alguien, que llegará sin hacer ruido,
silenciará a los Beatles, lo más pancho.
Y yo me iré con él. Con el Olvido.





Coplas

Me reía de mi llanto.
Discurrió el tiempo sin prisa
y mi vida cambió tanto
que hoy me hace llorar de risa.

*
Voy a llegar algún día
y ese día, de seguro,
sabré hacia dónde corría.
Y por qué tenía apuro.

*
Vivía cerca de un río
pero se murió de sed.
El río enseña a irse lejos
pero no enseña a beber.

*
Tenía un solo temor.
El temor de no ser bueno
siendo, con todo, el mejor.

*
Si temes por dolorosas
y penosas las espinas,
evita el amor, las rosas,
las rosas y las corvinas.

Y habrá, en lugar de rosas
y amor, solamente espinas.

Y, si se cuadra, corvinas...

*
El tiempo muge y embiste:
capa, verónica, estoque
y un matador que no existe.

¿Y lo que nunca será?
¿Y el que sin llegar al ruedo
ha sido cogido ya?

*
¿Qué perfección imaginas
para ti? ¿La perfección
que no alcanzó el Partenón
y consiguieron sus ruinas?

La perfección alcanzada
aunque de insólito modo:
buscando no decir nada,
poder expresarlo todo.

*
Esto lo practica Dios
y, algunas veces, el mar:
lo bueno de tener voz
no es hablar, sino callar.


Daniel Giribaldi (Buenos Aires, 1930-1984), Cantares y coplas, Torres Agüero Editor, Buenos Aires, 1986.




La Yapa

1- Edmundo Rivero le puso música a su magnífica Milonga de Don Quijote.


2-  De periodistas. Antonio Requini dijo de él:


3- Jorge Marziali lo interpreta así: https://www.youtube.com/watch?v=-rnDnaZeS7Y




Parroquiales

Este martes 26 de septiembre tendremos una noche de celebración de la poesía de los jóvenes. Nos visitarán, leerán sus poemas y reportearemos a estos premiados: 





¡Nos deseo una muy buena semana poética! 
Y para los talleristas que quieran, ¡suban sus poemas!! :)




sábado, 9 de septiembre de 2017

Clase N° 13 /año 4 - martes 5 de septiembre 2017

LUNFARDO/ 2:

"ES MEMORIA VIVA"

"ES UN MODO DE EXPRESIÓN POPULAR"


Y SEGUIMOS 
TRABAJANDO CON LOS TEXTOS DE LOS TALLERISTAS

¿Es lejano para nosotros el lunfardo? Sin saberlo, lo usamos todos los días de una u otra manera. Es nuestra identidad como argentinos.

El hecho de que el término lunfardo significara en su origen ‘ladrón’ llevó a conclusiones erróneas a los que se acercaron originariamente a estudiar el fenómeno. Pero el lunfardo no es –ni lo fue nunca– un vocabulario delictivo –explica Oscar Conde. En Lunfardo/1 (ver inmediatamente aquí abajo nuestro anterior encuentro) ya nos habíamos referido a “lo que no es”: no es un idioma, no es dialecto y ahora añadimos lo más importante: que no se derivó de un léxico delictivo



Leemos fragmentos de una presentación de Oscar CondeEl lunfardo en la literatura argentina, USAL / UCES / Academia Porteña del Lunfardo:

En Francia es el argot, en Brasil la gíria, en Chile la coa, en los Estados Unidos el slang. Todos son repertorios léxicos creados por esos pueblos al margen de la lengua general, pero básicamente compuestos de términos que pertenecen a esa misma lengua.

En suma, el lunfardo no fue, y no lo es ahora, ni un tecnolecto ni una jerga profesional. A lo sumo podría pensarse que se aproximó, en sus orígenes, a un sociolecto utilizado por una parte de la comunidad lingüística de Buenos Aires y sus alrededores –los habitantes del suburbio que, como se ha dicho tantas veces, no es en el caso de nuestra ciudad una categoría geográfica sino más bien una categoría social–.

Así como el tango no fue una creación de marginales tampoco lo fue en mi
opinión el lunfardo. Es cierto que tuvo la mala fortuna de recibir como nombre el de un vocablo que previamente significaba ‘ladrón’.

El lunfardo no es un léxico ladronil, y no lo es porque desde su mismo origen las palabras que lo integran exceden el campo semántico del delito. ¿Qué clase de relación con el robo pueden tener los términos mufamorfiventopuchogomía berreta? A mí se me hace evidente que ninguna. Nunca hizo falta ser chorro para decir minafasoorsái atorrante; no hace falta serlo ahora para decir birrapuenteartraba bardo.

El lunfardo debe ser entendido más bien como un modo de expresión popular.
Yo lo defino como un repertorio léxico integrado por palabras y expresiones de diverso origen, utilizadas en alternancia con las del español estándar y difundido transversalmente en todas las capas sociales y centros urbanos de la Argentina. Aunque su origen pueda ubicarse en Buenos Aires, este vocabulario se ha extendido ya a todo el país.

El lunfardo fue conformando una síntesis lingüística, una memoria viva de la historia de la Argentina, que da cuenta de los distintos grupos sociales que, por retazos, han ido de a poco dando forma a nuestro país y que nos recuerda a cada instante quiénes somos y de dónde venimos. 

Decía que este es el único vocabulario popular del mundo formado originariamente y en un alto porcentaje por términos inmigrados, traídos al país por inmigrantes europeos, especialmente italianos y españoles, pero no deben olvidarse las sucesivas migraciones internas hacia la ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires, que tuvieron lugar en la Argentina en particular durante la primera mitad del siglo XX

Es ya clásico que se citen habitualmente como ejemplos de lunfardismos palabras de origen itálico, como laburar (‘trabajar’), biaba (‘paliza’), fiaca (‘pereza’), yuta (‘policía’). Hay cientos –continúa Conde–. Pero también hay lunfardismos (y no son pocos) tomados del caló español –como gil (‘tonto’), chorear (‘robar’) o pirar (‘volverse loco’)–, de diversos africanismos traídos a América por los esclavos –como fulo (‘enojado’), marimba (‘golpiza’) o quilombo (‘prostíbulo’, ‘desorden’)–, o bien lusismos –como chumbo (‘revólver’) o tamangos (‘zapatos’)–, brasileñismos –como bondi o joya–, o anglicismos como espiche (‘discurso’), e incluso alguna palabra derivada del polaco, como papirusa (‘mujer hermosa’).
Así es como el lunfardo recibió el aporte de voces procedentes de lenguas aborígenes, como los quichuismos pucho (‘colilla’), cache (‘de mal gusto’) o cancha (‘habilidad’), o tomadas del guaraní, como matete (‘desorden’), o del araucano, como pilcha (‘ropa’)".


Y ya nos adentramos directamente a la riquísima poética del lunfardo. Y continuaremos con un poeta excepcional. 

Para ir adentrándonos, ahora leemos espectaculares poemas lunfardescos. 


ELLA SE REÍA

Enrique Cadícamo

Ella era una hermosa nami del arroyo.
El era un troesma pa´usar la ganzúa.
Por eso es que cuando de afanar volvía
ella en la catrera contenta reía
contenta de echarse dorima tan púa.

De noche él robaba hasta la alborada.
De día dormían los dos abrazados.
Hasta que la yuta que lo requería
lo alzó de su saca...Y ella se reía
mientras a Devoto iba el desdichado.

Tras la negra reja de la celda, el orre
a su compañera llorando batía:
"¡Por vos me hice chorro! ¡Quereme paloma!..."
Pero, indiferente al dolor del choma,
alzando los hombros, ella se reía...

Pasaron los meses...Vino la sentencia...
Pa Tierra del Fuego al punga embarcaban
a las seis en punto de una tarde fría...
A las siete, ella se apiló a otro rufa;
a las ocho, andaba con él de garufa
y, al sonar las nueve, curda se reía...







ALTRI TEMPI

Ricardo Ostuni
Trajeado a lo cuarenta; tarros, gacho
del mismo tono; moño floreado
tegobi bien finito, depilado;
durito como poste de quebracho.

No se si le doy bien en el escracho
pero así lo encontré, como piantado
de una vieja postal, medio escorado
repartiendo piropos sin empacho.

Su potién se le fue en el almanaque,
pero aún en su fonola suena el disco
de la tapin de ayer, del viejo empaque.

Hoy un purrete en jean, un tanto arisco,
lo miró, lo midió, le metió un saque:
¡"Andá a sacarle punta al obelisco".



AGONÍA DE UN RUFIÁN

Carlos A. Alberti

Yo sé que me ha fichao la tenebrosa.
La veo sobre el negro carromato
mostrarme su guadaña espamentosa
pa transportarme hasta la quinta´el ñato.

Los giles que la van de engrupimiento
no manyan que yo juno que me pianto.
¿Por qué habré de aflijirme si reviento,
 si a Dios ni al Diablo no le tengo espanto?

Yo tengo un pedrigré que no se achica
y hago pata ancha ante cualquier parada...
¡Ni amortajado lo verán que hocica
a este tungo, en su última largada!

O si en el cielo o el infiero dentro,
que se aguanten San Pedro o Lucifer:
si van de piolas, al primer encuentro
me los rajo a la tierra a padecer.

No sé si el otro mundo tendrá fecas,
catrielas con vestidos de percal,
farolitos tristones en las yecas
y patios milongueros con parral.

Si hay ginebra, tintillo y escolazo,
de entrada me las puedo rebuscar,
y de un cacho de cielo yo me amaso
un cotorro debute pa´roncar.

Cuando embroquen mi cancha gavionera
y los puntos que calzo en el gotán,
que se ajusten las santas las polleras
porque el cielo será de este rufián.






MOTIVO DE VIEJO TANGO
 Alvaro Yunque

Se l´espiantó la chirusa...
Es cierto que él la cascaba.
¿Qué hombre, si ama a su papusa
no le sacude una biaba?

El amurao unos días
la aguantó broncando y triste,
para él ya no hubo alegrías
ni aún metiéndole al alpiste.

¡Jué una!...se fue diciendo.
Si yo la cacho la escracho
y lloraba al irse yendo,
lloraba el muy macho.


FERIA DEL BROLI

Orlando Mario Punzi

Este muchacho Borges -la madona-
cómo levanta minas en la Feria;
se le vienen al pié, qué cosa seria,
la docente, la "bian", la solterona.

¿Qué manya de sus libros la chauchona:
las tapas, el color, la periferia?
Este muchacho Borges ¿qué bacteria
les mete contra piel y silicona?

¿Con qué virus, qué peste, qué difteria
las escracha de nalgas en la lona?
¿O las va de coyote de Siberia?

La duda me revienta la bordona:
¿este Borges quién es, porca misera,
Fangio, Vilas, Monzón o Maradona?




La Yapa

Aquí van diversos trabajos acerca del lunfardo, y un par de diccionarios. 

1- Esta es la tesis doctoral de Vanessa Iribarren, Universidad Complutense. http://eprints.ucm.es/9814/1/T31438.pdf

2- Este es un diccionario lunfardo on line http://static.scribd.com/docs/2oc2l395t89ap.pdf



3- Y por último pero no menos importante, las 23 primeras páginas del Diccionario Etimológico del Lunfardo, de Oscar Conde http://www.lingue.unipr.it/Materiali%20didattici/Forino/diccionario_lunfardo.pdf




Tenemos premiadas en el Premio de Poesía inédita de la FAP, todas ellas, sí, a quienes felicitamos de corazón:






¡Nos deseo una muy buena semana poética! 
Y para los talleristas que quieran, ¡suban sus poemas!! :)